Mérida, Yuc., 21 de noviembre

Emotiva, multicolor y prometedora fue la ceremonia de inauguración de la 30ª. Copa Yucatán, realizada esta noche en la cancha estadio Lorenzo Molina Casares del Club Campestre.

En su emotivo discurso, que incluyó un rápido recuento de lo realizado a lo largo de 30 años para hacer de la Copa un torneo “de clase mundial”, Jorge Robleda Moguel, presidente del Consejo Directivo del certamen, habló del esfuerzo que se hace con la mira puesta en ser cada vez mejores.

“Hace unos minutos me preguntaron cuál de estos 30 años ha sido el mejor, o el más especial para nosotros. Respondí que todos lo son, cada uno tiene su particularidad, sus anécdotas”, externó Robleda Moguel, quien al igual que el presidente del Club Campestre, C.P. Arturo Millet Molina, recordó a personas relacionadas de alguna manera con la Copa que ya fallecieron: el Ing. Adalberto Mañé, el Dr. Rafael Cobos (integrantes del comité organizador), Pablo Garza, ex presidente de la ATY, y Emilio Blanco, gerente del Campestre.

En su turno, José Antonio Flores, presidente de la Federación Mexicana de Tenis, felicitó a los organizadores y ofreció que la FMT brindará todo su apoyo para que la Copa Yucatán continúe su ascenso. “Como dijo Jorge Robleda, este es un evento de clase mundial, con un público también de clase mundial. Haremos todo lo posible para algo mejor para este torneo en 2017”.

La declaratoria inaugural estuvo a cargo del gobernador Rolando Zapata Bello, quien hizo público su apoyo a la Copa Yucatán para que continúe su ascenso. El torneo está en el Grupo 1 así que su siguiente paso sería subir al Grado A.

La ceremonia comenzó con el acostumbrado desfile de jugadores, a los que acompañaron Bruno Echegaray, dos veces monarca de la Copa Yucatàn en dobles; el venezolano Jimy Szymanski, finalista en 1992, y la yucateca Rossana Esquivel Baqueiro, quien destacó en su carrera como tenista. Además, en las gradas estuvo Leo Lavalle, uno de los últimos grandes jugadores mexicanos y capitán del equipo mexicano de Copa Davis

En la mesa principal estuvieron, además de Robleda Moguel, Flores Fernández y Millet Molina (dio la bienvenida), Jorge Haro Giffenig, director de la Copa Yucatán; Nicolás Madáhuar Bohem, vicepresidente de la FMT; Pablo Gamboa Miner, presidente de la Comisiòn del Deporte de la Cámara de Diputados; Erick Rubio Barthell, coordinador general de asesores del gobierno del Estado, Jesús Topete Enríquez, ex presidente de la FMT; Mauricio Millet Reyes, presidente de la ATY, así como altos directivos de empresas patrocinadoras como HSBC, Bepensa Cuauhtémoc Moctezuma.

La ceremonia de apertura de la Copa Yucatán tuvo dos momentos espectaculares: el acostumbrado bailable y, de nuevo, los fuegos de artificio. Ambos resultaron coloridos y generaron favorables comentarios.

La última vez que hubo una exhibición de juegos pirotécnicos en una ceremonia de inauguración del torneo fue hace un lustro, con motivo de los 25 años del certamen. En cuanto al espectáculo musical, lo presentó la Academia Técnicas del Arte Estudio de Danza.

Se invitó al público a salir de las tribunas para presenciar mejor los fuegos artificiales, que durante varios minutos iluminaron la noche.

Posteriormente se procedió al simbólico saque inicial, a cargo del diputado Pablo Gamboa Miner. Recibió el servicio el serbio Miomir Kecmanovic, actual número uno del mundo juvenil.